Como el resto de los casinos Caliente, está dedicado a satisfacer al cliente mientras este se divierte apostando a las carreras de caballos, de perros, al fútbol o jugando al bingo. La lista de bebidas es variada y a un precio muy accesible pues ahí lo que interesa es que vayas a jugar y apostar.

El ambiente es tranquilo y elegante, el lugar es amplio y decorado para que te sientas como en un casino de verdad. En cuestión de alimentos hay menú diario y algunas cosas a la carta, no es muy surtida pero te quitará el hambre.