20 formas de expresar un orgasmo

Cada quien sus orgasmos. Decir que ese momento único se tiene que vivir o disfrutar de una forma sería dictatorial. Algunos son discretitos, otros más argüenderos y algunos más, silenciosos.

Eso sí, escucharlos desde el otro cuarto, puede ser molesto. Chequen lo que esta vecina escribió: 

Vecinos que se sacuden mucho

Aquí hicimos un listado con las diferentes formas de expresar esos momentos épicos de lujuria y pasión:

1. Como los que hacen que Tarzán parezca un pajarito afónico. Con gritos desaforados, gemidos en 4DX, golpeteos incesantes contra la pared. Orgasmos que son dignos de una ovación.

2. El religioso. ¡Ay, Dios!, ¡Dios mío!, ¡que Dios me ampare! Todos aquellos que involucren a la figura a la que se le adjudica la creación de este mundo (y del sexo).

3. Amor en silencio. Pareciera que a la otra persona le gusta la necrofilia, pues su pareja no emite sonido alguno. Muy oportuno cuando se tiene sexo al lado del cuarto de los papás o en algún lugar público donde la gente puede escuchar.

4. Temblando de sabor. Estos son, quizá, los más extraños. Nos referimos a esos orgasmos que se expresan con gemidos temblorosos en los que pareciera que están arrancando un coche antiguo cuyo embrague nomás no jala.

5. La insaciable. Ese que pide más y más y más. No se conforma con que el otro esté chambeando duro con el bombeo, simplemente quiere más y lo quiere: YA.

6. El de los mil apodos. Es aquel que alaba a Mr. Macho, el nombre con el que se dirige al pene de su pareja, o a Doña Felicidad, la vagina de su chica. ¡Venga, Mr. Macho, me haces vibrar!

7. El de policía de tránsito. Avance, avance, avance. A la derecha, siga. Deténgase.

8. El anticipado. Es el que llega antes de que el otro se lo imagine. Apenas han pasado dos minutos cuando: ¡SOBRES! Ya está gimiendo con los ojos en blanco.

9. El aletargado. Por algún extraño motivo, algunos seres se echan unos orgasmos que duran más que la espera del Metro a las seis de la tarde. Esos afortunados brincan y hacen pausas en cuanto llegan al orgasmo.

10. Como Homo Habilis. Con sonidos guturales inexplicables, frases en arameo y gemidos que parecen emitidos desde el merito infierno. Ay, Jesús de Veracruz.

11. Inexpresivo. No sólo terminan en silencio, sino que no se les nota alguna expresión facial. Nada. Por más que uno se esfuerce en hacer que el otro disfrute, se queda impávido, inerte.

12. El novato. Se ríe tímidamente, evita la mirada y se acuesta a un lado una vez que terminan, sin lanzarte frase alguna. Poco falta para que huya sin retorno.

13. El fan del BDSM. Sólo alcanza un orgasmo cuando le surtes de nalgadas o la jalas del el cabello. Los orgasmos son profundos y duraderos. Inigualables.

14. El de peli porno. Ay, ya. Son esos que fingen durísimo. Que le hacen al cuento y que pretenden hacernos creer que no nos damos cuenta de que es puro argüende. Gritan, se revuelven el cabello, pero al poco tiempo están como si nada. 

15. El amoroso. Son esos orgasmos que se emiten con palabras de amor: te amo, eres todo para mí, eres lo mejor que me ha pasado. Llegan a la cumbre del sexo y no paran de decir cursilerías.

16. El posesivo. Tiene miedo a perder a su amorcito corazón. Por tal motivo, le pide que siempre esté con ella/él y le lanza frases como: no me dejes nunca, sin ti no soy nada, me muero si te vas. Un poco terrorífico si lo ven detalladamente.

17. El tántrico. Son esos orgasmos que duran y duran y que parece que nunca se terminarán. Estos valedores han aprendido técnicas ancestrales para prolongar los orgasmos y convertirse en los mandamás del sexo.

18. El depresivo. Lloran y lloran como la zarzamora. Al llegar al orgasmo no pueden evitar que se les salgan las lágrimas y que abracen desconsoladamente a sus parejas. Un drama de la vida real.

19. El enojón. Nada le gusta y tampoco hace algo por que su pareja le atine. Cuando por fin llega, termina y le lanza una serie de improperios al otro pobre. Vaya desgracia sexual.

20. El apresurado. Sabe que sus papás llegarán en cualquier momento, o bien, que debe irse YA al trabajo. Así que después de una breve sesión de sexo, termina con un orgasmo chiquitito e insulso. Nada más triste.

¿Qué otro tipo de orgasmos han experimentado?

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