La mano dormida…

Al momento de estar con uno mismo… ¡no hay quién te ponga un pero! Que si muévete más la derecha… que si hazlo más rápido o tal vez más lento… por eso como la querida Manuela, ¡no hay dos!

Existen muchas forma de tocarnos y de darnos placer a nosotros mismos, pero de que hay unas más extrañas que otras… ¡las hay!

En esta ocasión es el turno de exponer algunas de las cosas que los chicos hacen para darse placer, pero chicas… ustedes no dejen de preocuparse, ya vendrán las nuestras.

 

Consiste en poner una de las manos debajo de tus sentaderas por un buen rato… y cuando digo un buen rato, lo digo en serio. Hasta que NO la sientas.

Cuando esté suficientemente dormida, puedes proceder a masturbarte con ella como comúnmente acostumbras.

¿Por qué darle una oportunidad?
Porque te va a dar una sensación diferente… la torpeza, a veces, puede ser muuuy placentera.

Grado de dificultad:
Es sumamente fácil… lo peor que puede pasar es que sientas hormiguitas por toooodo tu cuerpo.