Las tinajitas

Este restaurante es el hermano pequeño de Las Tinajas en la Cuauhtémoc, ambos establecimientos de familia y sazón española con el acento puesto en la cocina casera, sin mucho reparo en la decoración. El lugar es atendido por sus propietarios para consentir a españoles nostálgicos de los bares de tapas y mesones (donde se puede desayunar una tostada con jamón serrano, café y jugo de naranja) y para chilangos con gusto por los cocidos y las raciones.

Las albondiguitas con salsa de tomate y vino blanco con papas son una porción servida con generosidad para picar, las acompaña un pan de campo de corteza muy firme del que te puedes llegar a enviciar. Eso con una cerveza o una copa de vino (tienen al menos ocho etiquetas en este formato a precios muy decentes) y seguido de una ración de jamón o de pisto manchego (un menjurje de calabacín, pimientos, tomate y cebolla con dos huevos fritos) no tienen pierde. Si los visitas un jueves o un sábado por la noche, quédate al show de flamenco, la cocina cierra tarde.