Descripción

Crítica

A partir de ahora la ciudad será tuya con todo y una copa de tinto en tus manos. Así es, bastará con mirar al frente, voltear a la izquierda, a la derecha y girar tu cabeza 180 grados para tener en tus ojos el paisaje dek DF –cerros y volcanes en el paquete- y en la tarde-noche relajarte con los magenta nocturnos del cielo citadino visto desde el restaurante Miralto.

Con esto de la rehabilitación del Centro Histórico, Miguel Amerlinck Corsi se dio a la tarea de enchular el piso 41 de la Torre Latinoamericana: le dio una lavadita a los ventanales, metió mesitas de madera  e iluminó el espacio con luces rojizas. ¿Y qué resultó? Un restaurante tipo lounge en donde podrás saborear alimentos gourmet desde temprano hasta poco antes de la medianoche.

El fin de semana cuentan con desayuno buffet de las 9 hasta las 12 del día.