Los besos son una de las mayores muestras de deseo, amistad, protección, cortesía y erotismo en decenas de culturas. Para rendirle un pequeño homenaje a las mieles del amor, cada 13 de abril se festeja el Día Internacional del Beso.
Síndrome del besador compulsivo
Sí, hay gente que no puede dejar de dar besos. Al parecer, es una especie de trastorno obsesivo compulsivo (padecido seguramente por aquellos que todo el día besan a sus perrhijos).
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Tu cerebro está recolectando información
A nivel fisiológico, un beso apasionado involucra cinco nervios craneales: el facial, el hipogloso, el glosofaríngeo, el olfatorio y el trigémino.
Puedes tener un orgasmo solo con besos
A esta condición se le llama basoexia y quien la tiene, pase lo que pase, no alcanzará el orgasmo si no es con unos besos mediante.
Mero control de calidad…
Al parecer, los besos tienen un fin que va más allá de lo romántico y se relaciona con nuestro proceso evolutivo. Es muy probable que la transmisión de feromonas sea una forma de descubrir qué tan conveniente es la pareja en términos genéticos.
Los besos son mejores que la morfina
Existen varios estudios sobre cómo reducir el dolor o la depresión de formas insospechadas (la música, por ejemplo, es una de ellas). Además de que el cerebro enamorado libera dopamina, adrenalina y norepimefrina, unos besos de lengua per se le añaden oxitocina y serotonina a la lista. Al parecer, el efecto que produce es similar al de la morfina (¿habrá síndrome de abstinencia por falta de besos?).
¡A besar se ha dicho!
Para alcanzar un récord Guinness, la pareja tailandesa de Ekkachai y Laksana Tiranarat se besó durante 58 horas, 35 minutos y 58 segundos. Además de felicidad, con el beso más largo del mundo obtuvieron 2,500 euros y dos diamantes. Por cierto, gracias a esta pareja se instauró el Día Internacional del Beso. ¡Enamorados del mundo: rompan esta marca!
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Dos semanas de besos
Si alguien juntara todos los besos que da una persona promedio a lo largo de su vida, el resultado serían dos semanas ininterrumpidas en contacto con labios ajenos.
