Todos necesitamos que nos hagan un mixtape: un casetito grabado con canciones, un CD con la portada pintada con aerosol o ya de menos un playlist para tu iPod en tu USB de 256 mb.

El formato es lo de menos, siempre es chido que te dediquen una canción, desde pedirla en el radio hasta que te la pongan en un bar cuando estás de intenso. Mucho mejor cuando alguien se toma el tiempo de hacerte una selección de canciones, sólo para ti y con el fin que sea. Los mixtapes son una tradición que ha mutado con el tiempo y que seguirá viva por siempre. A todos nos dice algo la música.

Aquí una serie de elementos que no pueden faltar para que te conviertas en un maestro en el arte de armar un mixtape… o ya de menos una buena lista de rolas para tu fiesta.