Es difícil y toma tiempo convertirse en el número uno de las listas y colocarse en el gusto del público, sin embargo, permanecer es todavía una tarea más complicada. La tarea ha sido exitosamente completada por Paul Van Dyk, quien el viernes por la noche demostró que sigue y seguirá siendo el favorito de muchos mexicanos.

Sin importar la distancia que hay que recorrer para llegar al teatro chino en Six Flags o la temperatura de los últimos meses del año, ahí se dieron cita más de cuatro mil fans de todas las edades en una fiesta policromática, parte de las celebraciones del octavo aniversario de MásLabel México dentro de su quinta fiesta EMPO (Electronic Meeting Point), donde el Dj-productor fungió como la cereza del pastel de cumpleaños y se encargó de hacer vibrar una vez más a la capital mexicana.

Pasada la media noche, y después de las someras mezclas de José Spinnin, Ivan Mateluna, y dos hombres con cabezas de ardilla, el público se encontraba impaciente por escuchar a su ídolo en vivo quien realiza un tour mundial para promocionar su sexto álbum de estudio “Evolution” el cual estará listo en 2012. Al poco tiempo de llegar al escenario las caras de los asistentes cambiaron sus expresiones de desesperación por euforia mientras se dejaban llevar por los beats de temas clásicos como For an Angel, concebido en 1993 para el disco 45RPM, reeditado cientos de veces para compilaciones de las más importantes casas productoras como Mute, Ministry of Sound o Urban Records.

De entre las sublimes transiciones del setlist, el público escarbó entre los recuerdos de más de una década de éxitos y cantó al unísono coros de canciones clásicas (Time of our lives), no tan clásicas (Home), y de remixes consagrados como aquel de Sunday que hiciera para Hurts en 2006 o más recientemente Skies on Fire original de First State, temas que han colocado a Van Dyk en los primeros lugares de las listas mundiales de popularidad. El recinto estaba abarrotado y los congregados deleitados por los sonidos que provenían de la consola del Dj.

Dos horas después, las transiciones cedieron paso al silencio que fue aniquilado con aplausos y gritos por parte de un público que yacía en éxtasis con ganas de más, pero que al mismo tiempo estaba complacido por la “Evolución” del trabajo de Paul, como le gritaban. El Dj finalizaba su participación en el EMPO y regresaba al escenario sólo para dar las gracias. Van Dyk mostró que ha sabido enfrentar y trascender a la vorágine de consumo por lo novedoso en un mundo abarrotado de propuestas musicales hechas a través de técnicas de copiar-pegar.

Paul Van Dyk es uno de los pocos Dj que tomó la estafeta dejada por Robert Miles y David Morales a mediados de los noventa. Ha sido considerado dos veces el mejor del mundo y desde hace ocho años siempre se ubica en las primeras 10 posiciones en The Dj-list, además de tener en su haber un Grammy; En 2002 realizó la banda sonora para la película mexicana Zurdo. El tour Evolution ha visitado ciudades importantes como Santiago de Chile, Taipei y Nueva York, Van Dyk hará dos presentaciones de dicha gira en Monterrey y Mexicali este fin de semana.