Chilango

Música para desayunar los domingos

El movimieinto hippie de los 60 es un ingrediente b?sico

En los
próximos días se presentan en la Ciudad de México artistas que desde que han
salido, siempre les acompaña la etiqueta folk (con todas sus derivaciones: free-folk, freak-folk, psych-folk,
etc.).   

Tanto Devendra Banhart (27 de agosto – José
Cuervo Salón) como Panda Bear (3 de
septiembre – Polyforum Siqueiros), han salido de la necesidad de crear canales
alternativos, originados de forma independiente y en contra de los estándares
abusadores que los corporativos siempre aplican.

Muchos de
los actuales abanderados, como Sunburned Hand Of
The Man
, se formaron con el punk más ortodoxo y han encontrado
en la naturaleza la inspiración para generar otro tipo de música caótica. Muy
diferente a la urbana. 

La mayoría
de los músicos del folk viven en el campo o en lugares ordinarios. Tratando de evitar (caer en) el "hype" de las ciudades grandes. Construyen los típicos grupitos de cuates que tocan juntos y ya,  sin ningún tipo de representación, promoción o vínculo entre
ellas. Y de pronto la voz se corre, y es cuándo conectan con esfuerzos similares, armando colaboraciones, girando juntos o compartiendo las fechas en que coincidan. También las publicaciones especializadas o sellos
de fanáticos como: Child of Microtones, Eclipse, Ecstatic Yod, Qbico, Spirit of Orr,
Wholly Other o Young God
, ayudan a identificar una movida más aglomerada. 

Es
imposible identificar todas las influencias, pero algunas constantemente recordadas son John Fahey , Robbie Brasho y Ali Akbar Khan; pasando por Karen Dalton, Nina Simone, Roscoe Holcomb
o Caetano Veloso. También Bob Dylan, Woody Guthrie y toda esa escuela dell folk americano también está en la mezcla.

Nunca ha habido
una escena bien identificada, y para algunos tocar es más bien una necesidad. La industria de la música nunca ha tenido un anaquel para el folk, y es mejor que siga así. Sencillo, ejecutado de frente a una chimenea, en el porche de alguien o en la
calle.

Bien lo
dijo Ben Chasny, que pertenece a Six
Organs of Admittance
, uno de los actos más prolíficos en el (sub)género:

 

"We attempt to create a web of inspiration
and beauty that will bypass all of the mundane aspects of whatever we call art,
like museums and galleries and eBay and bullshit record collecting."

 

Lado B
recomienda tres actos actuales de free-folk que tienes que oír: