El festival fue un gran pretexto para hacer un viaje a tierras caribeñas. Turistas y lugareños no hicieron más que caminar unos pasos para encontrarse con un pequeño escenario en donde el Rhythm & Blues de Perry y Mcknight llenó las expectativas del público.
Pero antes de que la voz de este par llegara a oídos mexicanos, la cantante Caro Montes abrió el escenario. A pesar de su imponente voz y de sus enormes intentos por acaparar la atención del público, la regiomontana no pudo contra el calor de la tarde y los rojos maravillosos del atardecer que nos deslumbraron aún más que su llamativo vestuario y su excéntrico peinado.
Todo lo contrario ocurrió con Phil Perry. Tal como prometió, nada fue lo mismo después de escucharlo. El músico, reconocido por su amplio registro vocal y su importante aportación a la música, se ganó al público con su carisma y dulzura inigualable. Cursi o no, Perry derramó miel y los asistentes lo agradecieron.
El público confuso que llegó a la orilla del mar de pura suerte, y que jamás había oído de él, aprovechó los ritmos de "Forever" para acostarse en la arena, relajarse y sentir las notas, con esto Perry demostró que sin saber nada de su música cualquiera podría llegar a convertirse en su seguidor. El R&B se hace más fácil con él a la batuta.
La gran clausura del festival corrió a cargo del neoyorquino Brian Mcknight, el más esperado de la noche por ser uno de los más sobresalientes exponentes de R&B contemporáneo de las últimas décadas. Ya sobre el escenario, el intérprete de "Back at one" hizo lo suyo. Y aunque demostró no poseer el ángel de Phil, la audiencia no sólo quedó encantada con la interpretación de sus más grandes éxitos sino que coreó al ritmo de su voz.
Acompañado de sus 2 hijos, Mcknight logró que este festival tuviera un cierre digno de cualquier show internacional.
Del 25 al 28 de noviembre se llevará a cabo el Festival de Jazz de la Riviera Maya 2010, contará con la presencia de Mike Stern, Al Di Meola, John McLaughlin y Armando Manzanero .