Justo un año después, Caifanes la volvió a armar en el Palacio de los Deportes. Los Dioses Ocultos dieron el arranque de una noche plena de nostalgias cuando pasaban las ocho y media de la noche, teniendo el lugar lleno a reventar con 18 mil personas.

La pasión caifán se hereda y se transforma para deleite de viejas y nuevas generaciones que disfrutaron con la misma entrega el show de anoche.

Así lo percibimos desde las afueras del foro al encontrarnos con Jean Carlo que a sus 20 años traía su peinado enmarañado cual Saúl Hernández en sus inicios.

“Ando diario así y en la calle, me latió el dark y el glam. Me enseñó mi tío desde los 11 años y me gustó hacer las cosas como Saúl y Sabo, he querido hacer una banda parecida y que regrese el glam”, nos platicaba el fan.

También las familias le cayeron, como el tío sonsacador, Hugo Martínez, quien llevó a sus sobrinos Marcela Martínez, así como Iván Contreras con su esposa e hijo de 5 años. Orgullosos se les escuchaba: “Es de familia lo rockeros”.

También lo vivió de esta manera Julio Álvarez “El Chato Jaguar”, quien iba con sus esposa, hijos y sobrina. “A mis hijos y sobrinos los he arrastrado y afortunadamente les ha gustado. Es un regalo tener a Caifanes cuando creíamos desaparecían, sigue la esencia de la banda y de Saúl, lleva varias operaciones en la garganta y se mantiene, por eso cante bien o cante mal, somos sus aliados”.

Empezaron con “Para que no digas que no pienso en ti” y “Te estoy mirando”.

Hernández se arrodillaba para honrar a sus adeptos y les declaró: “Caifanes a tus pies”, recibiendo gritos de satisfacción.

“Miedo” y “Nubes”, animaron la presentación para dar paso a “Mátenme porque me muero”, una de las más aclamadas.

El set siguió con “Cuéntame tú vida”, mientras en la pantalla central se veía un recorrido gráfico de su original imagen al estilo The Cure y hasta viejos boletos de antiguos conciertos.

Las almas chilangas se dejaron atrapar después con: “Antes de que nos olviden” y “El negro cósmico”.

“De noche todos los gatos son pardos” y “Perdí mi ojo de venado”, mantuvieron la euforia para dar más con “Aquí no es así” y “La Célula que explota”, misma que inicialmente Saúl permitió la cantará su público, haciendo estremecer al Domo de Cobre.

También realizó un homenaje musical a sus influencias con “Por ti” de Óscar Chávez, “Héroes” de David Bowie y “Te lo pido por favor” de Juan Gabriel.

Finalmente cerraron con “Quisiera ser alcohol”, “Viento” y “La Negra Tomasa”. Saúl Hernández, Sabo Romo, Diego Herrera, Alfonso André y Rodrigo Baills se despidieron con las emociones al máximo, cuando de fondo se oía “Imagine” a la voz de su creador: John Lennon.

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