Increíbles. Tenían tantos detalles que no sabías qué ver pero todo te encantaba. Fueron los que siempre quise y nunca tuve. Había otra versión en blanco con rojo que aunque también buenísimos no tenían nada que hacer con éstos.
Increíbles. Tenían tantos detalles que no sabías qué ver pero todo te encantaba. Fueron los que siempre quise y nunca tuve. Había otra versión en blanco con rojo que aunque también buenísimos no tenían nada que hacer con éstos.