A menos de un año de cumplir su primer centenario de vida, en este colegio de raíz profundamente lasallista conviven sin conflicto el pasado y el presente: aunque la enorme casona que una vez fue una hacienda y que ahora alberga los salones se mantiene casi intacta (los arcos, el enorme patio), la nueva ala construida hace unos años y que contiene el auditorio resulta en un divertido contraste. La educación está enfocada en el desarrollo de valores como la solidaridad, la tolerancia y el respeto (con tres clases que no se consideran de religión pero que contienen la filosofía cristiana). Si bien el sistema educativo se mantiene dentro de lo tradicional, con vistas a tomar elementos del constructivismo, la educación que ofrecen es completa y han adaptado la antigua hacienda a las necesidades modernas, tanto en sus tres salones interactivos (dotados con estos pizarrones), como en los dos laboratorios de computación y las instalaciones deportivas (una enorme alberca y la cancha abierta de básquet y la techada de futbol y atletismo). En la capilla hay misas mensuales y los padres pueden pedir que preparen a sus hijos para la comunión. Aunque sólo ofrece primaria hay pase directo a secundarias, como el Simón Bolívar de Mixcoac.
Horario: 7:50 a 14:00 hrs.