En
1940, Olivier y Leigh lograron resolver los problemas legales de sus viejas
relaciones, y finalmente contrajeron matrimonio en Santa Barbara, en el estado
de California. De ahí se embarcaron al proyecto de montar Romeo y Julieta, en Broadway. La crítica fue dura con la pareja, al
ensañarse particularmente con la "voz aniñada" de Vivien.
Más tarde, la actriz
realizó viajes por el norte de África y actuó para las tropas durante el año de
1943, justo antes de caer enferma y atacada de fiebre. Se le diagnosticó
tuberculosis, mal que la aquejaría hasta el día de su muerte en 1967.

Su
segundo premio de la academia se debió a su interpretación de Blanche DuBois,
al lado de Marlon Brando, en la película de Elia Kazan, Un Tranvía Llamado
Deseo
. Aunque muchos denostaron su
actuación, al final quedaron las palabras de Tennessee Williams, quien
reconoció que Vivien había sobrepasado las expectativas que él mismo había
fraguado para el personaje.
Los años que siguieron estuvieron marcados por
largos períodos de furia y depresión. En 1960, después de haber trabado una
relación amorosa con el actor Jack Merivale, Vivien se divorció de Laurence
Olivier. A pesar de su estado de salud, tuvo algunas apariciones esporádicas en
teatro; incluso ganó un premio Tony por mejor actriz en el musical de Broadway,
Tovarich. Finalmente pasó a mejor vida en el año
de 1967.

Cuando ganó el óscar por "Lo que el viento se llevó".