-El Malayo: Chiquito, chic, medio románticón y muy rico. Aquí puedes venir a probar algunas recetas picantes y un muy buen pulpo a las brasas. Es un buen pretexto para comer y compartir.

– Caravanseraï: Es probablemente el lugar más popular de la zona. Aquí no necesariemente vienes por una comida completa (aunque sirven bocadillos) sino por un postre o a la sobremesa. El chiste es encontrar la mesa que más te acomode (todas son diferentes) y dejarte guiar por el instinto en la amplia variedad de tés que ofrecen.

(Foto: jlastras en Flickr)