El ambiente es de colores pastelosos, siilas y bancos con orillas cromadas, servicio eficiente.
Con la primera cucharada el afortunado visitante se aísla y traslada al pasado,a tiempos mejores, más tranquilos y amables, en los que había momentos para disfrutar de una nieve de zapote y limón.
El local es ideal para sentarse a echar novio o simplemente ver pasar la vida mientras dura el vasito.
Roxy cuenta con seis sucursales, incluída una en la Cineteca Nacional