Marble Slab Creamery llegó a la ciudad con un concepto divertido, que parece pensado especialmente para niños pequeños y personas en busca de sabores únicos, sin importar la edad.

Su menú tiene más de veinte bases de helado, hechas en la propia sucursal, a las que puedes agregarle cualquier ingrediente que encuentres en la barra (incluye frutas, nueces, chocolates, galletas y mucho más) para crear sabores personalizados. A diferencia de otros lugares, aquí no te cobran de acuerdo con los gramos; tú eliges el tamaño y puedes ponerle lo que quieras sin ningún costo extra.

Marble Slab está decorada con colores divertidos y fue diseñada para que los clientes inventen su helado y puedan seguir recorriendo la plaza, lo cual resulta una mejor opción, considerando que el área para sentarse es reducida y será complicado que consigas lugar.

Te recomendamos probar aquellos sabores que se salen de lo común: el helado de peanut butter, por ejemplo, logra un equilibrio perfecto entre dulce y salado, mientras que los de bombón y algodón de azúcar suelen ser una excelente opción para los más peques, no sólo por su sabor, sino por su gran colorido. El menú incluye fudge brownie delight, strawberry shortcake, smoothies, malteadas y la clásica banana split.

¿Te podemos dar un tip? Si estás a unos días de celebrar tu cumpleaños o el de tu hijo, considera mandar hacer un pastel helado personalizado en Marble Slab. Sólo debes ordenarlo con dos días de anticipación.