Por: Mariana Camacho

Es un gran momento para la coctelería en nuestra ciudad. Los restaurantes como Donatella le dan vuelos y protagonismo con mezclas de especias, hierbas, frutas y algunos hallazgos de temporada. Aquí, una de las cartas de presentación es el trago mexicano: con chile serrano, pepino, limón, mezcal y jarabe de agave, pídelo para abrir el apetito, tiene un rico toque ácido que vas a necesitar para lo que sigue…

La cocina, de inspiración americana, toma platos clásicos y porciones abundantes: a la entrada, por ejemplo, hay un plato de ostiones Benville (algunos del tamaño de tu mano) gratinados con una bechamel con trocitos de champiñones y camarón. Para el fuerte, un plato de cocción lenta y sustancia es el short rib, un trozo de carne suave que pasa 19 horas de proceso antes de llegar a la mesa, acompañado de un puré de papa con un poco de aceite de trufa blanca. Para quedarse en la línea clásica, hay una pavlova, que puedes pedir con frutas al oporto.  

Para los días en los que llama la fiesta (los miércoles son el nuevo viernes, dicen) hay una superterraza.