Directito de guerrero, aquí debes probar todo: el pozole verde o blanco (este último pídelo con sardina). También pide los tacos dorados con consomé y la sopa de médula, todos acompañados no de limón, sino de lima ácida.

O puedes pedir tacos de guisado; el de chile relleno de picadillos con pasas y frutos secos es simplemente alucinante.