Es la segunda franquicia de cebicherías peruanas (sí, con “b”) que llega a México. Un concepto gastronómico más tradicional y sin un starchef detrás. Para quien busca los sabores más auténticos, éste es el lugar perfecto.

El espacio es agradable, fresco eiluminado aunque contrasta la vanguardia arquitectónica con las presentaciones más bien tradicionales de los platos.

El personal es amable y con muy buenas intenciones pero hace falta un poco más de interés en explicar de qué va cada platillo sin hacer comparaciones que en ocasiones resultan poco motivantes:para los meseros el tiradito –rebanadas marinadas de pescado- es simplemente …una especie de sashimi, mientras que el Pisco Sour, que es el coctel más difundido de Perú, es …una Margarita pero con un licor que se llama pisco.

Los platillos están bien confeccionados y los sabores del Tacu tacu son ricos y gustosos, picantes, medio dulzones por el suave camote que aparece por todos lados. Luego de tres platos y salsas muy similares cae en la monotonía.

El trato del personal es amabilísimo y la carta de vinos está muy bien pensada, seleccionada y sobre todo muy bien presentada (pensando en el maridaje) pero sobre todo a precios verdaderamente accesibles.