¿Por qué nos molesta?
¡Es una estafa! Síntoma del capitalismo rancio que
amenaza con acabar con todo lo bueno en este mundo. Ya te cobraron treinta
pesos por un poco de agua con saborizante que no ha de valer más de cincuenta
centavos y ¡se atreven a cobrarte otros diez pesos por unos tragitos más! Y
desde luego que no te dejan meter bebidas de fuera. ¿Dónde está el Dios de los
justos?

¿Qué hacer en estos casos?
Llévate una licorera y cuando ya estés bien puesto,
arma un escándalo al estilo del Sr. Beale en la película Network
.
A la próxima te darán tu refill gratis… si no llaman a la policía.

Bien
pensado, mejor no bebas tanto refresco.

Network
"I’m as mad as hell, and I’m not going to take this anymore!"