Son originarios de China y, como todo producto "Hecho enChina", los noodles se han extendido por todo el mundo. Su fácil aceptación no es sorpresiva, pues son camaleónicos–osease decarne de camaleón (¡NOT!… aunque, si así lo quieres, puedes)–,se adaptan atus necesidades, gustos y posibilidades;son fáciles de preparar, de comer y de llevar; se pueden disfrazar del saborque más te guste, son llenadores, se pueden comer secos o en caldo, no engordan(Bueno no, tampoco exageremos)…

En fin, las opciones y virtudes de estoslarguiruchos enredosos son demasiadas, es por eso que los amamos.