Hasta el día de hoy, el origen de la pavlova es incierto pues existe un debate no resuelto entre Nueva Zelanda y Australia para ver quién de los dos fue el que inventó este postre. Lo que sí es cierto, es que su nombre hace honor a la bailarina de ballet Anna Pavlova, quien visitó Nueva Zelanda y Australia en 1926.

Y aunque en sí, una pavlova es un merengue crocante que en su interior tiene una consistencia cremosa y está cubierto con crema batida y frutas frescas; la principal diferencia con el merengue tradicional, es que en su preparación este postre lleva maíz o maicena.

Casa Virginia

Madre e hija, Mónica Patiño y Micaela, son las creadoras de este restaurante con mesas comunales, que presenta una cocina casera con porciones abundantes, ideales para compartirse. Dentro de las especialidades saladas tienen la sopa de lentejas y el pollo a la cacerola con chorizo, y por el lado dulce está la pavlova con frutos rojos que decoran con flores.

Casa Virginia
Monterrey 116, Roma
5207 1813

Café Torino

Ésta es una trattoria creada por Alfredo Russo, chef del Dolce Stil Nuovo en el Palacio Real de Turín con una estrella Michelin. Puedes pedir platillos típicos como la pizza Margarita, o el risotto al azafrán, y para el postre, un must es la pavlova, con almendras, crema batida con queso mascarpone y frutos rojos.

Café Torino
Vasco de Quiroga 3200, Santa Fe
5292 2486

Corazón de Alcachofa

Este restaurante ofrece un concepto denominado “cocina de mercado” porque los platillos se renuevan cada día, pues aunque tienen un menú, si ese día los ingredientes no tenían la mejor calidad o están fuera de temporada, no se cocina. Además, otro detalle que los caracteriza, es el uso de ingredientes orgánicos como en el caso de la pavlova, postre en el que utilizan huevos orgánicos para hacer el merengue de la tradicional.

Corazón de Alcachofa
Altavista 15, San Ángel
5550 5002

¿Has probado este postre?

También lee:

-Historia Sabrosa: La Especial de París
-Donas, los nuevos escaparates del sabor
-Todo con Red Velvet