Hace unos días, la bloguera Pamela Allier visitó el restaurante Lalo!, uno de nuestros lugares consentidos de la ciudad para brunchear rico y a gusto. Por lo que nos enteramos —a  través de una historia que compartió en Instagram—, pidió un ceviche que, ¿por qué no?, acompañó con unos chiles jalapeños en lata que traía consigo, según dijo.

“Amo comer cositas con chile, así que traigo mi latita de chiles para echarle a mi cevichito que se ve buenísimo. Me encanta que las latas conservan todos los nutrientes y además son reciclables, entonces es perfecto”, dijo Allier en el video que dura apenas 14 segundos.

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Te dejamos el video para que lo veas.

Lo anterior fue suficiente para que surgiera el hashtag #LatitaDeChilesChallenge, a través del cual se compartieron bromas y también indignación por la peculiar costumbre de la bloguera. Pero más allá de los gustos personales a la hora de comer o intentos de publicitar un producto, ¿qué tanto se vale o no llevar contigo una lata de chiles a un restaurante?

El chef José Andrés del restaurante J, en el Hotel W de la Ciudad de México, lo dejó muy claro en un mensaje publicado en Twitter:

Si bien las latas de chiles no están explícitamente prohibidas en los restaurantes, hay sitios en donde se pide a los comensales no ingresar con alimentos y bebidas ajenos al lugar.

Pero hay otro punto: comer es una experiencia, degustar nuevos sabores, mezclas y propuestas de chefs y cocineros, y Eduardo Plaschinski —del equipo de Lalo!— lo sabe. Al agregar un producto ajeno al plato, “arruinas un platillo perfectamente ejecutado con una lata llena de conservadores. Para eso, mejor te quedas a comer en tu casa”, dijo a Chilango.

La pregunta del millón: ¿es verdad que las latas conservan todos los nutrientes?

Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), el chile jalapeño es rico en hierro, calcio, potasio, sodio y vitaminas como tiamina, riboflavina, niacina y retinol. Sin embargo, la versión enlatada es “cero recomendable por la cantidad de conservadores que contienen, como el glutamato monosódico, que favorece la retención de líquidos y aumenta el factor de riesgo de sufrir presión arterial elevada”, explicó la nutrióloga Monserrat Cruz.

Si tu eres fan de los chilitos en conserva no hay nada mejor que los prepares en casa, aquí te dejamos la receta. Si vas a salir a comer a algún restaurante y te gusta el picante, pregúntale a tu mesero si tienen algo que cumpla con tus expectativas seguro tendrán algo para complacerte. No demerites el trabajo de los cocineros y chefs que hacen hasta lo imposible porque siempre salgas satisfecho del lugar.