¡¿Tortas de un kilo 300 gramos, 40 centímetros de largo y 10 de ancho?! No es broma, aquí la especialidad es una tortita que se llama Gladiador y que es una verdadera bomba para el estómago. Su preparación consiste en jamón, queso, tocino, salchicha, bistec, pollo, chorizo con huevo, queso, jitomate, cebolla y aguacate.

¿Alguien dijo tragones?

Desde 1992, este platillo ha sido todo un fenómeno en las calles del Centro Histórico. Sus creadores son el luchador Súper Astro y la señora María Guadalupe Cortés, quienes en un viaje que hicieron a Tijuana cocinaron lo que 21 años después sigue siendo uno de los consentidos de la zona. “Teníamos hambre y se nos ocurrió comprar carnes frías, una baguette y legumbres, la hicimos muy al estilo mexicano”, nos contó Guadalupe Cortés.

Ya en el DF, consiguieron en primera instancia un pequeño local ubicado en la calle de Pescaditos en donde estuvieron seis años. Después por la demanda se mudaron a Luis Moya en donde ya cumplieron 15 años.

“En un principio la idea no la queríamos así, un baguette que pesara un kilo 300 gramos y que midiera 40 centímetros de largo y 10 o 15 cm de altura pues, ¿quién se la iba a comer?”. Sin embargo, fue una novedad que “pegó” y sigue siendo de lo más pedido en el lugar. De hecho tienen un concurso que consiste en comérsela en 15 minutos y no pagarla al final. “En 21 años sólo 99 personas, hombres, se la han comido entre los 15 y 11 minutos”.

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Gladiador (Alexia Zúñiga)

Afortunadamente, para los que son menos tragones también tienen presentaciones más pequeñas. Está la Gladiador Jr. que se prepara con los mismos ingredientes que la Gladiador o con algunas otras variedades pero se sirve en una telera de aproximadamente 20 cm, y la micro Gladiador en una de 10 cm.

Gastronomía y lucha libre

Dado que es un lugar creado por un luchador, en el negocio no podía faltar algo relacionado con el tema. Alrededor de 74 máscaras y fotografías de diversos guerreros del ring son lo que decoran este lugar. Además, para El Día del Niño y los aniversarios del restaurante invitan a algunos luchadores para que se tomen fotos con los niños y les den su autógrafo; y si la delegación les da permiso organizan funciones de lucha libre.

“Las máscaras son obsequiadas por los compañeros, tenemos de Atlantis, Santo, Blue Demon, Tinieblas, El Místico, y además está el traje original de Súper Astro”.

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El Cuadrilátero (Alexia Zúñiga)

Y aunque éstas sólo son de muestra, una de las estrategias que les ha funcionado para atraer más clientela es que en la compra de una Gladiador (sean las veces que sea) la dueña regala una máscara que aunque no es precisamente original, es algo que la gente agradece.Sin embargo, la oportunidad de llevarse una auténtica será posible para la persona número 100 en comerse una Gladiador en menos de 15 minutos, ¿te animas?

Dónde: Luis Moya 73, Centro, 5521 1171