Botas e impermeables, juguetes que bien podrían ser para un bebé humano, disfraces de Halloween, la oferta de productos para mascotas es cada vez más extensa y variada. También en cuanto alimentación: restaurantes tienen menús para perros —de helados a hamburguesas—, las croquetas premium cada vez presumen de más beneficios a la salud, mientras que otro tipo de alimentación cobra cada vez más fuerza, la dieta Barf para perros.

Qué es la dieta Barf para perros (y gatos)

La dieta Barf (en español ACBA, Alimentos Crudos Biológicamente Apropiados) consiste en alimentar a los perros con carne (85%) y vegetales crudos, adicionados con algunas vitaminas, como la E. “Lo que buscamos con una dieta cruda es ofrecerle al cuerpo alimentos aptos para él, que no sean alimentos que causan un esfuerzo metabólico grande o que desgasten al cuerpo en vez de nutrirlo; (ir) más allá de que el cuerpo (del perro) esté solo ‘lleno'”, dice la veterinaria Fernanda García.

Dieta BARF para perros

Foto: ShutterStock

Los beneficios de la dieta Barf, de acuerdo con esta veterinaria que la ha investigado y aplicado desde hace siete años, son los siguientes: 1) a corto plazo: mejores heces, pelo, aliento fresco, mejora el olor del perro en general, aumento de la vitalidad y energía; 2) a largo plazo, aumento del sistema inmune, perros más sanos y capaces de enfrentar patógenos, aumentar la esperanza de vida y disminuir el riesgo de enfermedades degenerativas.

Pero este tipo de alimentación no está libre de detractores. El académico de la Facultad de Veterinaria de la UNAM, Carlos Gutiérrez, explica que “las croquetas son el único alimento que contienen la cantidad de nutrientes necesarios para el animal”, según un texto publicado en UNAM Global. La razón: la comida casera suele carecer de vitaminas que los perros necesitan, al pasar por procesos de congelación o cocción.

Dieta BARF para perros

Foto: ShutterStock

Justo ese es el reto de la dieta Barf o la alimentación cruda, dice la veterinaria Fernanda García. Un veterinario proBarf está capacitado para diseñar un menú personalizado para tu mascota, con todas las proteínas, vitaminas y minerales necesarios. El problema es que como hay quienes creen que es simplemente poner comida cruda en un plato y no es así. “Si van a  comprar una dieta (Barf) bien hecha que es con una persona capacitada (…) recomiendo que puedan ver exactamente qué está comiendo su perro, qué cantidades, porciones, si es molido que tenga etiqueta de Sagarpa. Si los dueños la van a preparar, que un veterinario supervise la dieta”, agrega. 

Lo primero que un veterinario valorará para planear una dieta Barf para tu perros son los siguientes factores: evaluar al perro en general, peso, salud, edad.  “En perros jóvenes es muy sencillo, en perros grandes un poco más complicado”, dice Fernanda; aunque está dieta es ideal para todos los perros de todas las edades (aunque la dieta es personalizada).

Perritos que comen Barf

Dieta Barf para perros

Foto: Carmen Murillo

Niji —un perrito de raza Shih-tzu— comenzó a comer alimento crudo cuando su dueña Carmen Murillo comenzó a cuestionarse “qué era lo que tenían realmente las croquetas y si eran realmente buenas para él. Sentía que era como darle galletas todos los días y no algo natural”. Desde el cambio de alimentación, Carmen notó que el pelo de Niji se hizo más suave, fuerte y menor caída; “además veo que la disfruta mucho, se la come en cuestión de un minuto, mientras que las croquetas realmente no le entusiasmaban nada”. 

Dieta Barf para perros

Foto: Natalia Ramos

Cuando Maya llegó hace tres años a vivir con Natalia y su novio padecía de diarreas constantes. A pesar de que probaron con varias croquetas premium, Maya no mejoraba; y los estudios médicos indicaban que no tenía nada. “Pensamos que era ya un tema emocional. Nos pasaron el contacto de un chavo que sabe mucho de perros, la conoció y dijo que no tenía ansiedad ni estrés; nos dijo que conocía a una persona que estaba empezando a vender la dieta Barf y sugirió probar para descartar alguna situación alimenticia”.

De eso ya dos años. Natalia cuenta que “desde el momento que empezó a comer Barf sus heces fueron firmes. Nunca me había emocionado tanto al ver popó; también comenzó a verse más sana y fuerte”.

Dónde comprar Barf en CDMX

Carmen y Natalia compran quincenalmente o cada 10 días la dotación de comida Barf para sus perros. Su proveedora es Tatihana González— a quien puedes contactar vía WhatsApp: 55 3866 1086-; ella les deja la comida en contenedores para evitar plásticos de un solo uso.

La veterinaria Fernanda García también vende Barf. En cuanto al precio, depende de cada perro, de sus requerimientos -según edad, estilo de vida, salud- y tamaño. Por ejemplo, para su husky de 23 kilos, Natalia paga 850 pesos cada 10 días.

De acuerdo con Fernanda, los costos van desde $150 por semana con 7 porciones. Cada porción está diseñada para cada día de la semana. Hasta los $600 por semana con perros gigantes que comen más de 1 kg diario.

¿La orina y heces son menos contaminantes con la dieta Barf?

Dieta BARF para perros

Foto: ShutterStock

Hace una semanas, en Chilango publicamos un texto sobre cómo contamina la orina de los perros y sus afectaciones a la salud de las personas. Una medida inmediata para reducir el daño es usar “difusores de orina”, que es agua con jabón o vinagre que se debe rociar sobre la orina. 

Hay especialistas que indican que una dieta cruda deriva en heces y orina menos contaminante. De acuerdo con Fernanda, uno de los beneficios al medio ambiente de seguir la dieta Barf es “menor generación de gas metano, pues los perros producen menos gases porque no hay un proceso de fermentación de granos y cereales (que tienen varias marcas de croquetas)”.