Los olores que predominan recuerdan al licor de plátano, o a durazno acompañado de mucha miel… imaginen una lata de duraznos en almíbar, pero con aroma aún más dulce, más meloso, parecido a una mermelada.

El sabor es justo lo esperado, fruta, dulce, miel. Durazno, piña madura, vainilla, hasta mango.

Este si es difícil de conseguir, a menos de que vayan a Canadá. No lo he encontrado en México pero existen tiendas especializadas que tienen otros Icewine bastante recomendables.

El Icewine casi siempre resulta delicioso (las chicas se vuelven locas con este vino), algo que hay que deben probar algún día pase lo que pase. La desventaja: el precio.