En el restaurante de la Casa de los Azulejos un Batman camina entre las mesas con seguridad. Se dirige directamente hacia los sanitarios y todos lo miran un poco sorprendidos. Mide casi 1.80 m y de no ser porque, obviamente, Batman no existe, podría decirse que su traje es el verdadero. Del mismo modo en que entró – rápido, seguro y directo a sus negocios en el restaurante–, salió como si nada.
Estatuas humanas en madero
Afuera se reunió con otros superhéroes y personajes de televisión, películas, series, caricaturas o de la chabacana imaginación de algún chilango. Todos sobre la calle Madero en el Centro Histórico, donde irónicamente, desde que es peatonal es más difícil caminar.
Estatuas humanas en madero
Ellos son una nueva movida de personajes que se muestran en las calles para ganarse unas monedas, porque ya son pocos los mimos y las célebres estatuas que se quedaban inmóviles hasta que les depositaras unas monedas y hacían su gracia por un rato, hasta que se quedaban inmóviles de nuevo.
Estatuas humanas en madero
A estos nuevos personajes muchos les llaman estatuas, aunque es sólo un decir, porque se mueven y bailan, todo por algunas monedas. Aunque el verdadero negocio está en tomarse fotografías con los niños, familias y turistas del Centro.
Estatuas humanas en madero
Están lejos del “artista callejero” tradicional, más bien son personajes: hay un Depredador, dos Transformers, un Batman, un Bob Esponja, un Spiderman; con trajes de plástico, cartón, tela moldeada, foamy, etc. Al final de cuentas lo que le sobra es ingenio al mexicano.
Estatuas humanas en madero
Algunos, como el Batman, hasta dan ganas de tomarse la foto, sí da el gatazo, su traje de plástico y tela lo hacen parecido al de las películas. Hasta grandote está. Los Transformers se ven curiosos, son una mezcla entre chistosos y de penita, pero igual vale la pena.
Estatuas humanas en madero
El soldadito de Toy Story sobresale por su pintura verde ¿cómo soporta tanta pintura? ¿No se intoxica? En esa calle hay para todos, hasta podría decirse que una foto con su personaje favorito es el reemplazo moderno de la foto en Chapultepec o en la Villa de Guadalupe. Si pasas por Madero y, por lo menos, no te llamaron la atención –por llamativos o por ridículos–, no viniste al Centro.
A ustedes, ¿qué personaje les gusta o cuál creen que hace falta?