Lo único parecido entre una cruda y esta comedia es el dolor de cabeza. Una es provocada por el alcohol, y la otra por la risa que tendrás que soportar durante hora y media. Este film es una de las sorpresas más gratas del año, su bombardeo de gags y situaciones inverosímiles son un trago refrescante en una cartelera repleta de guiones que se van con la broma fácil (sexo y parodias urticantes). El mérito se lo lleva el director/guionista Todd Phillips (Viaje censurado, Old school), un hombre que vuelve a demostrar que alcohol – más adolescentes-en-cuerpos-de-hombre-, es un combo ganador.

En esta ocasión cuatro amigos: Doug el novio, Stu el mandilón, Phil el galán, y Alan, el… “freak”, van a Las Vegas a la despedida de soltero de Doug. Llegan a un casino, suben a su suite de lujo, comienza a beber y de pronto corte a: Stu amanace sin un diente, su habitación está destrozada aunque hallan un bebé, un tigre y una gallina. Pero… hay algo que les falta: Doug. En ese momento, el film se vuelve la versión desenfrenada de “Memento” mezclada con “Virgen a los 40”. A lo largo de dos días, estos amiguetes reconstruirán lo que hicieron aquella noche de copas, aquella noche loca, donde conocerán a la policía, una linda stripper, y hasta a Mike Tyson (un cameo divertido y memorable). Otro detalle del film, es que la fuerza histriónica no recae en una superestrella, sino que cada actor le da un toque personal a su personaje, como una pieza del rompecabezas que embona químicamente con el hombre que tiene a lado. El casting no pudo ser mejor.

Eso sí, advertencia: al finalizar la cinta, querrás ir a beber con todos tus amigos, o ya de plano, ir a rentar “Rainman”. Lo entenderás cuando la veas.

Pero para seguir con la fiesta… la banda de Warner trae unos juegos para ti:

El Excusotron (ideal para cuando te vayas a Las Vegas in permiso)

Peleando con Mr. Chow (y varios tigres)

Adivina qué personaje de la peli eres y sobre todo… ¿cuál es tu esilo de fiesta?