Poder sin límites

Por Jaime Azrad @_azrad

La popularidad de la técnica del found footage, -en el que se pretende que el material audiovisual que se muestra fue encontrado como evidencia de una historia real- definitivamente va en aumento; El proyecto de la bruja de Blair (1999), Cloverfield: Monstuo (2008) y Actividad paranormal (2007) son algunas de las películas que la han usado para narrar su historia. Poder sin límites se suma a la lista.

Uno de los retos más grandes de la técnica es lograr la verosimilitud, pues si el evento que fue grabado es tan aterrador (y real) como se muestra, nos obliga a preguntarnos porqué habría alguien grabándolo en vez de huir. Pero la película de Josh Trank supera este obstáculo con escenas y efectos bien llevados que nos llevan de preguntarnos lo anterior a desear ser uno de los protagonistas, pues estos, además de ser los “camarógrafos”, tienen superpoderes.

Andrew, Matt y Steve son tres amigos de la preparatoria que se adentran en una aventura que los dotará de habilidades sobrenaturales que, mientras los asombran, les revelarán un lado oscuro de sí mismos que no conocían. Y con imágenes generadas impecablemente por computadora, persecuciones y explosiones hacen de Poder sin límites una cinta meramente entretenida.

Como público, aprendemos junto con los protagonistas cómo usar sus poderes, y ellos están tan curiosos como nosotros. Algunas de las secuencias más divertidas se dan al principio, cuando se acostumbran a esta nueva etapa de su vida, en la que efectos sencillos logran experiencias de las que nos gustaría formar parte, y lo hacemos.

La diversión da paso a las consecuencias del abuso de poder, pues los tres muchachos usan sus capacidades para tener dinero y sexo mientras se divierten con bromas que le juegan a la gente. Pero lo realmente interesante radica en el perfeccionismo de la realización de la cinta.

Con un presupuesto de 12 millones de dólares (poco para este tipo de producciones en Hollywood), la película crea una nueva visión en cuanto a la producción de ciencia ficción se refiere. A la vez, arroja resultados muy satisfactorios en taquilla y en valores de producción, abriendo quizás un nuevo camino para una realización cinematográfica alternativa, en la que lo más caro y elaborado no sea necesariamente lo mejor (en materia de efectos especiales).