El ingeniero y experto en efectos especiales Tony Dyson, creador de “R2-D2” de la saga fílmica “Star Wars”, falleció a los 68 años en su casa de la isla de Gozo, en Malta, donde vivió desde 1990.

El cadáver fue encontrado por la policía en su casa, luego de que amigos alertaron que no lo habían visto en varios días y un vecino observó que la puerta de la vivienda estaba abierta, reportó la emisora británica BBC y el “Times of Malta”.

[También lee: 10 lecciones de Yoda]

Las primeras hipótesis apuntan a una muerte por causas naturales; sin embargo, se dio a conocer que se le practica una autopsia para determinar las razones de su fallecimiento.

Dyson fue el encargado de convertir en realidad las ideas de Ralph McQuarrie, el diseñador conceptual que dio aspecto de “R2-D2” y otros personajes de la franquicia.

Construyó ocho modelos del que se convertiría en el androide más querido de “Star Wars”, que hizo su primera aparición en 1977 en el “Episodio IV: Una nueva esperanza”, y en cuyo cuerpo se metería el actor Kenny Baker.

[También lee:Lugares frikis en el DF: especial de Star Wars]

El ingeniero y profesor fue el encargado de sus colores, mecánica y los sonidos que componían su célebre lenguaje. Este robot aparece en las siete producciones de la franquicia.

En su carrera, Tony construyó hasta 36 criaturas espaciales, además de armas láser y trajes. Participó en “Superman 2”, en “Moonraker” y “Verdugo de dragones”. Durante los últimos años dictó conferencias por todo el mundo, en las que hablaba de sus personajes y la robótica.

También lee:

‘Star Wars: Headspace’, música de una galaxia muy, muy lejana

¿Existió un Lucas Trotacielos en España?