Por Josue Corro

Kick Ass es una cinta violenta

y divertida acerca de la obsesión por la cultura pop: cómics, música y YouTube.

Un éxito.

Conoce a Dave Lizewski, un

adolescente geek de Nueva Cork que ama los cómics, ver porno en su computadora,

y que posee una habilidad única: ser invisible a las mujeres. Un día, harto de

que los bullys lo asalten y golpeen, se pregunta: ¿Por qué nadie en la vida

real ha intentado ser un súper héroe?

La respuesta la escupen con

pereza sus dos mejores amigos: «Porque los superpoderes no existen en la vida

real».

Pero este golpe de sentido común

no detiene a Dave, quien ordena un traje de buzo en Amazon y se convierte en un

vigilante nocturno. Sin poderes, sin habilidades marciales, sólo con la

consigna de tener un vecindario más justo. A diferencia de otras cintas, él no

se vuelve un héroe de la noche a la mañana, sino que en su primer día de

"trabajo" recibe una dolorosa lección: es apuñalado y atropellado. Después de

meses de rehabilitación, Dave regresa a las calles y defiende a un hombre que

es atacado por una pandilla. La pelea es grabada desde el celular de varios

testigos quienes la suben a YouTube. El resultado: más de 100 millones de

visitas, y el nacimiento de un héroe de carne y hueso: Kick Ass.

A partir de este momento, Kick

Ass se vuelve un coctel molotov de

referencias modernas, violencia y una refrescante mirada al

cine-de-cómics-y-superhéroes. El director

Matthew Vaughn (protegido de Guy Rittchie), adapta de una manera eficaz

y divertida la historieta de Mark Millar,

y la dota de detalles que enriquecen la adaptación sobre el cómic: el

OST contrasta con las imágenes que vemos en pantalla, la forma en que presentan

a Red Mist -no diré quién es este personaje para evitar spoilers- genera un

giro de tuerca, y sobretodo la importancia que le da Hit Girl.

Ella merece un punto y aparte: es

el personaje femenino de acción más mortífero, divertido e impactante que he

visto en años. Años. Hit Girl, es una niña de 13 años con la boca más sucia que

Polo Polo, y la eficacia de Chuck Norris y Beatrix Kiddo. Desde su primera

escena, en la cual destaza a unos dealers, cada vez que aparece ya sea

interactuando con su padre, conocido como Big Daddy, un ex policía en busca de

venganza (interpretado por Nicholas Cage, quien gracias a este papel, tendrá un

segundo aire en su carrera); o pateando traseros y salpicando la pantalla al

mejor estilo gore-cómico de Tarantino, su presencia se vuelve necesaria, ella

es la verdadera protagonista de la cinta

Vaughn supo como dotar a cada uno los "héroes" de

una personalidad definida y un rol para que Kick Ass esté destinada a ser un material de culto generacional, una

referencia pop automática y sobretodo una visión diferente de ver a los

blockbusters veraniegos.