De qué va
Es
1963, el presidente de los Estados Unidos es asesinado en Dallas Texas,
minutos más tarde, por radio y televisión, el gobierno informa que el
responsable es Lee Harvey Oswald, supuesto comunista con un pasado en
Rusia, horas más tarde, Oswald es asesinado mientras la televisión lo
registra todo. El Fiscal de Nueva Orleáns, Jim Garrison sigue el caso
con cierta incredulidad, comenzará a una investigación que desnudará a
todo un sistema.

¿Por qué es tan buena?

JFK
fue para toda una generación una fascinante lección de política. Ningún
libro de texto podría habernos ilustrado mejor que Oliver Stone los
vericuetos del poder: intrigas, traiciones, tratos en lo obscuro,
mentiras y muerte. Todo con una edición impresionante (la edición es la
película) y un elenco estelar donde todos, absolutamente todos brillan
(desde Gary Oldman, Tomy Lee Jones, Joe Pesci, Kevin Bacon, Donald
Sutherland, John Candy e incluso Kevin Costner).
Sólo
tres años después de estrenada la cinta, fue caído muerto en Lomas
Taurinas, Tijuana, Luis Donaldo Colosio. Cuando supe la noticia, no
pude pensar sino en Oliver Stone y su JFK, esperando que en algún lado
hubiera un valiente Jim Garrison (o un Oliver Stone para tal caso) que
quisiera destapar aquella cloaca…, y seguimos esperando.

Datos curiosos

La
calle donde transitaba el carro del Presidente, justo al momento de ser
abatido a balazos, se llama Elm… si, como la de las pesadillas.

La otra opción para hacer el papel de Kevin Costner como fiscal de distrito era… ¡Harrison Ford!