Por Adrián Zacapa

Dos

amigos desempleados atropellan por accidente a un hombre en medio de la

noche. El hombre llevaba consigo un maletín con 2 millones de euros.

Nadie los ha visto (o eso creen ellos) por lo tanto deciden tomar el

dinero y esconder el cadáver. Con esta simple premisa inicia El cuarto

de los muertos, adaptación cinematográfica de la novela homónima de

Franck Thilliez aparecida en 2005 que construye una vertiginosa y

efectiva historia con los mejores elementos del cine policiaco y del

thriller.

Una

niña diabética ha desaparecido y como en todas las películas del género

la policía busca desesperadamente llegar antes de que sea demasiado

tarde. A los elementos clásicos que componen este filme, se suman

recursos no usados con frecuencia dentro de este género los cuales dan a

la cinta cierta frescura. Entre ellos se encuentran la taxidermia, un

zoológico que sufre asaltos, bares S/M, un tranquilizante para animales,

entre otros.

Lucie

Hennebelle la brillante integrante del cuerpo policíaco, como es

costumbre en este tipo de cintas, esta involucrada de manera personal

con el caso a resolver. Motivo por el cual muestra gran disposición por

descubrir el enigma al tiempo que provoca la envidia de sus colegas

hombres. Hennebelle es interpretada por Mélanie Laurent, destacada

actriz francesa a quien los mexicanos recordarán por el papel de

Shoshanna Dreyfus en Inglorius Basterds pero que cuenta con una amplia

carrera en su país natal con títulos como París y El latido de mi

corazón.

La

actuación de Laurent, con su carisma y habilidad para transmitir

emociones es uno de los aciertos de la cinta. El otro, es la gran

influencia que tiene de El silencio de los inocentes. Ambas cintas (como

ambas novelas) tienen protagonistas con pasados de los que desean

escapar y actúan, en gran medida, para poder algún día "hacer que los

corderos dejen de llorar."

La

referencia más notoria a la cinta donde conocimos al Dr. Hannibal

Lecter es el encuentro cara a cara entre el policía y el villano. El

descenso al infierno representado por la guarida del homicida serial.

Clarice Starling entra al mundo macabro de Buffalo Bill de la misma

forma en la que Lucie Hennebelle resuelve el caso de este filme. Pero

desde el estreno de la primera cinta a ésta han pasado casi 20 años y

aunque sus protagonistas quieran olvidar su pasado, nosotros no lo hemos

hecho. El cuarto de los muertos nos deja con la sensación de haber

reencontrado a un conocido distante y no sorprendernos por ver cuanto ha

cambiado sino porque no lo ha hecho en absoluto.