¿De qué va?
Desde pequeño Danny (Jet Li) es “adoptado” por un vengativo prestamista llamado Bart (Bob Hoskin), quien lo trata y educa como a un perro de pelea hasta convertirlo en un arma letal. Apartado del mundo, Danny no tiene otra elección más que obedecer a la primera orden y atacar sin dudarlo. Un día, por casualidad, conoce a Sam (Morgan Freeman), un afinador de pianos ciego. Él y su hijastra Victoria (Kerry Condon) le muestran a Danny un cálido mundo familiar hasta el momento prohibido para él.
¿Por qué el título en español nos saca de onda?
El título de esta pelí ha sido tan controversial que cambió durante su promoción. El film fue originalmente llamado Danny the Dog, pero temiendo originar protestas por racismo contra los asiáticos, de último minuto, la distribuidora modificó el título a Unleashed (inclusive se pueden encontrar trailers y carteles promocionales con ambos títulos). Finalmente a México llegó como La bestia, pretendiendo mostrar indicios de la historia degradante y violenta que vive el personaje principal.
A pesar de los intentos por darle un nombre políticamente correcto, pero muy taquillero, preferimos el título original; porque más allá de las espectaculares coreografías de pelea, la película muestra una historia de amor y compasión donde la música es el antídoto del dolor. Danny the dog es redimido a través del amor y sólo acepta esa redención cuando, literal, se libera de la correa.