Por Oswaldo Betancourt Lozano

Neill Blomkamp recurre una vez más a la ciencia ficción, con más merito que en Elysium (2013), pero sin llegar al nivel de Sector 9 (2009), que es lo mejor que nos ha ofrecido hasta el momento.

La premisa es atractiva: el inventor de los robots policías explora la inteligencia artificial y crea a Chappie, un robot con sentimientos que es secuestrado y criado por unos criminales. Esto mientras otro inventor (un ex militar) trata de sacar a toda costa su propia creación a las calles.

Los avances promocionaban a Chappie como una especie de fusión entre Wall-E (por su carácter infantil) y Terminator (por su actitud de matón), el robot terminó siendo más de lo primero y menos de lo segundo. El guion no alcanza a maniobrar tan bien la acción y los planteamientos en torno a la inteligencia artificial y la conciencia, problema que no le permite despuntar.

La historia se desarrolla en Johannesburgo, Sudáfrica, tierra natal del director y, al igual que en su ópera prima, aterriza adecuadamente la historia para que sea verosímil en este escenario.

Otro punto de encuentro con su ópera prima se da al inicio. Se trata de un par de entrevistas de corte documental, pero este recurso sobra porque no lo vuelve a utilizar y por lo mismo no está justificado.

Chappie efectivamente roba la pantalla con su forma de ser: es algo tierno, chistoso y a la vez logra ser rudo, todo sin perder su esencia infantil. Sharlto Copley le da voz al robot y se confirma como el actor fetiche de Blomkamp, fue protagonista de su debuty antagonista de Elysium.

Sin embargo, hay un problema importante en la jerarquización de los personajes. Sigourney Weaver está desaprovechada y Hugh Jackman es un némesis opacado a lado de Yo-Landi Visser y Ninja; este dúo tiene tanto peso que en un punto se siente como un videoclip de dos horas.de Die Antwoord, y esa no era la idea.

Ojo, esto no significa que la película sea desafortunada o decepcione;de hecho Blomkamp logra darle un cierre digno a su relato, con un final que no esprecisamente feliz, sino que deja entreabierta la puerta del destino de lospersonajes (como en Sector 9).

En conclusión,Chappiees simplemente una opción palomera.