No todo en el Episodio V son líneas catchy
(como los "bad feelings" de todos, o el constante coqueteo entre Leia y
Han
Solo), peleas entre máquinas grandiosas y enanitos verdes que hablan
chistoso.
También hay sufrimiento, hay llanto y amputaciones. Esta película merece
un
Oscar, un Nobel, un Ariel, dos Premios Oye y tres Grammys por el simple
hecho
de que tiene la escena más violenta en la historia del cine. Sí, cuando
Darth
Vader le corta la mano A SU PROPIO HIJO.

¿Se imaginan a Tim Allen con una sierra
de Mejorando la Casa amputando a sus molestos niños? (Yo lo haría). O
qué tal
Marlon Brando como Vito Corleone as himself castigando al imbécil de
Fredo
cortándole no digamos la mano, sino el dedo pequeño del pie? A ninguna
mente se
le había ocurrido este recurso, sólo el enfermo de Lucas pudo haber
ideado eso.

Y nos encanta.