Igual que en la industria musical hay one hit wonders en el mundo del cine, ya sean guionistas (Richard Kelly, que después de Donnie Darko), directores (Tony Kaye, Historia americana X) o actores (Macaulay Culkin, Mi pobre angelito, El ángel malvado) que a pesar de juntar varios créditos tienen éxito una o dos veces, mientras que otros no quitan el dedo del renglón hasta dejar atrás ese trabajo que los encasilló. A continuación algunos actores que no se quedaron estancados.
Daniel Radcliffe
Su primer aparición en la pantalla grande fue en El sastre de Panamá (2001), pero fue Harry Potter quien catapultó su carrera y gracias al maguito lo conocemos, pero no es todo lo que ha hecho. Terminando la saga le dio vida a Arthur Kipps en La dama de negro para después encarnar a Allen Ginsberg, uno de los principales poetas de la generación beat, en Kill Your Darlings; se trata de personajes muy distintos, no sólo por su perfil, sino por el género de cada película, horror y drama respectivamente.
Este año lo vimos como Wallace en Sólo amigos?, una agradable comedia romántica, y ahora hace a “Ig” Perrish en Cuernos, quizás uno de sus personajes más obscuros hasta el momento, después nos tocará decidir si nos convence, o no, como Igor en Victor Frankenstein. Además ha hecho teatro y un poco de televisión. 
Chloë Grace Morentz
Para muchos sigue siendo Mindy McCready, también conocida como “Hit Girl” o la niña/adolescente letal de Kick-ass, lo malo es que probablemente no repetirá este papel, pues aunque le encanta dijo que la piratería echó abajo la posibilidad de una tercera entrega.
Regresando a su carrera, Morentz pronto se hizo de un abanico de personajes memorables como Carrie White (Carrie), Abby (Déjame entrar) e Isabelle (La invención de Hugo Cabret), de las cuales la última es la mejor. En 2014 salió en Si decido quedarme, The Equalizer – trabajos que pasarán de largo –, y Las nubes de María, en esta última fue Jo-Anne Ellis y con ella demostró nuevamente parte de su talento que, esperemos, sea como los buenos vinos y mejore con el paso de los años. 
Robert Pattison
Después de interpretar a Edward Cullen, no fue nada fácil para Pattison quitarse la brillantina de encima, pero se ha juntado con la gente correcta y poco a poco ha ido mudando la piel del vampiro por la de otros personajes. Allá por 2009 fue Salvador Dalí en Little Ashes, para muchos fue demasiado pasar de un personaje a otro y no funcionó en taquilla; mientras que a Agua para elefantes (2011), otra adaptación literaria, cinta que recaudó más de su costo de producción, pero una vez más el éxito llegó de la mano del romance cinematográfico.
Las cosas se pusieron interesantes con la llegada de David Cronenberg, y algo de él le gustó al director canadiense después de dirigirlo en Cosmópolis (2012), pues lo incluyó nuevamente en su elenco para ser parte de Mapa a las estrellas (2014). También de este año y quizá su cambio más notable esté en The Rover, un drama distópico de David Michôd en el que le hace segunda a Guy Pierce. 
Kirsten Stewart
La habitación del pánico (2002), Zathura (2005) e Into the wild (2007) son tres películas a. de C. (antes de Crepúsculo) en las que la podría ser recordada, pero seguramente todo fue eclipsado por Isabella Swan y la monotonía de sus expresiones. Vino Adventureland (2009) y The runaways (2010), luego la gente no estuvo muy contenta viéndola en On the road (2012), adaptación del libro de Jack Kerouac; sólo Blancanieves (Blancanieves y el cazador, 2010) pudo darle una opacadita a “Bella”.
Siguieron trabajos más serios como Las nubes de María, algo habrá aprendido de trabajar a lado de Juliette Binoche y Oliver Assayas; no perdamos de vista Still Alice, aquí compartiendo la pantalla con Juliane Moore, y Camp X-Ray, donde vuelve a ser protagonista, en esta ocasión como una militar chambeando en Guantanamo y se hace amiga de uno de los detenidos.
Steve Carrell
Lo ubicamos principalmente como comediante, ya sea a lado de Will Ferrell (El reportero: la leyenda de Ron Burgundy y Encantada) o por su cuenta (Virgen a los 40, Super Agente 86), pero Carrell está lejos de ser un actor encasillado. Tiene en su repertorio doblajes importantes, uno en Horton y el mundo de los Quién (2008) y no olvidemos que ya le prestó su voz a Gru en tres ocasiones: Mi villano favorito y su secuela (2010 y 2013), y en el spinoff de los Minions, (2015); además ha salido en películas como Que voy a hacer con mi marido (2012), Loco y estúpido amor (2011), Dan en la vida real (2007) y la inolvidable Pequeña Miss Sunshine (2006), que si bien tienen un toque de comedia también muestran un lado más “serio” de Steve.
Sin embargo, nada de eso se compara con la nueva cara que le veremos, literal, en Foxcatcher (nos llega en enero de 2015), película basada en un caso real donde interpreta a John Eleuthère du Pont, un millonario entusiasta de los deportes que se convierte en entrenador y homicida; la crítica está hablando mucho de esta actuación e incluso consiguió un par de nominaciones en los Globos de Oro y los Premio SAG.
Emma Watson
Si bien la recordaremos siempre con cariño como la pequeña (y luego más madurita) Hermione Granger, terminando las adaptaciones de J.K. Rowling cambió de look e hizo un buen trabajo en Las ventajas de ser invisible (2012), Por las mismas fechas estuvo en Ladrones de la fama (2013) y en este año fue parte del elenco de Noé, estos créditos ayudaron a que la viéramos de otra forma.
El verdadero cambio de Emma no vino del terreno cinematográfico, sino de su intervención en septiembre de este año como Embajadora de Buena Voluntad en la ONU, donde habló sobre igualdad de género en un evento especial de la campaña #HeforShe.
