Chilango

Trouble Will Find Me

d

The National es una banda que infunde (merecidamente) respeto. Me declaro públicamente un ignorante de su obra y trayectoria, sé de su existencia desde hace varios años y he escuchado sus canciones más populares, pero nunca despertaron mi curiosidad auditiva (digamos que no son mi tipo de banda). Esta semana, por mi compromiso con chilango.com y ustedes que leen estas reseñas, por primera vez escuché uno de sus discos con atención y en varias ocasiones (seis, para ser preciso), así que escribo con pocos prejuicios y a partir de mis primeras impresiones.  

Al mismo tiempo busqué algunos datos biográficos y de ahí viene mi ánimo respetuoso (como músico quisiera una tercera parte de lo que estos hombres han logrado): 14 años de carrera, seis Lp´s de estudio con varios cientos de miles de copias vendidas (los dos primeros editados por su propia disquera), giras internacionales, participación en asuntos políticos y sociales, una creciente popularidad y (según la mayoría de los críticos que consulté) una mejoría constante de sus capacidades musicales. Logros irreprochables y, repito, dignos de admiración y respeto. 

Su nuevo disco de estudio, Trouble will find me, salió a la venta el 21 de mayo y (en este aspecto coincido con los críticos) es una muy buena pieza de pop: letras que se distinguen del género por no abusar de las obviedades y las metáforas forzadas; un vocalista con un gran manejo de la afinación que construye frases fácilmente adheribles y, aunque algo parco al cantar, da visos de tener más potencia de la que muestra; músicos que disfrazan hábilmente la sencillez melódica de sus canciones, la mayoría compuestas con pocos acordes que se repiten una y otra vez, pero que por el desarrollo armónico aparentan una mayor complejidad. AdemásTrouble will find me presume una de las mejores portadas que he visto este año e invitados de talento indiscutible: Sharon Van Etten, Surfjan Stevens, Richard Reed Parry (Arcade Fire) y St. Vincent. Su gran defecto es provocado por el riesgo inherente de la autoproducción: es demasiado largo. 

El estilo de The National, monótono y entregado casi por completo a la melancolía, no es de mis favoritos. Creo que para que una expresión artística basada en la sencillez logre resonancia se requieren de un poco de magia y genialidad. Entiendo el entusiasmo desbordado de algunos críticos pero no lo comparto, Trouble will find me tiene algunas canciones brillantes, potentes y emocionantes, pero a mi gusto abusa de los mismos recursos en demasiadas ocasiones y por su extensión se convierte en un disco pesado y difícil de escuchar de un tirón: 13 canciones y 55 minutos de la misma fórmula no son poca cosa. Como disco es una obra para fanáticos, los iniciados podemos quitarle algunos tracks y diseñar una versión un tanto más digerible y disfrutable. Demasiado regodeo en sí mismos y poca consideración con el nuevo público. Insisto, como músico quisiera una tercera parte de lo que estos hombres han logrado, pero como hipotético productor de este disco le rasuraría el mismo porcentaje: con sólo nueve canciones sería una bomba y no un plomazo.

En abril estrenaron en el festival de Tribeca una película sobre ellos, cuyo trailer me ha entusiasmado más que seis escuchas de Trouble will find me (con todo respeto, claro está):