Una de las secciones más interesantes de Zona MACO son las actividades paralelas dentro de la feria. Este año hay un par de presentaciones de libros que conciernen, el primero, al impacto que tuvo en México una importante escuela de arte y diseño de principios del siglo XX, y la segunda de una artista mexicana emergente con una propuesta que en lo personal me parece muy interesante.

Se trata de los libros “La Bauhaus y el México Moderno. El Diseño de Van Beuren” y de la mexicana “Fritzia Irizar. Selección de proyectos 2003-2014”.

Aquí les diré a grandes rasgos la importancia de La Bauhaus, por qué me gusta tanto el trabajo de Fritzia y cuáles son los motivos por los que incluyo a Donald Judd en mi baraja de opciones a seguir en Zona MACO.

La Bauhaus

Bauhaus –traducido literalmente significa “casa de la construcción”– fue una escuela de artesanías, arte y diseño fundada por el arquitecto Walter Gropius en la República de Weimar (hoy Alemania) en 1919. La idea de esta escuela era que sus alumnos fueran tanto artistas, como artesanos y diseñadores. Más tarde se incorporó la arquitectura a la escuela, con lo cual se llevaba un poco más allá la vieja idea de la “obra de arte total”; esto es una obra de arte que hace que distintas disciplinas se unan en un solo trabajo.

Y esa fue precisamente la innovación de la Bauhaus: pensar el diseño junto con otras disciplinas para llegar a una producción más completa. La escuela duró hasta 1933. A los nazis no les parecía que existiera una escuela tan progresista.

Los alumnos de esta escuela terminaron incursionando en áreas tan diversas como la arquitectura, diseño gráfico, artes, diseño de interiores, diseño industrial, la tipografía y las artes, entre otros. Personajes como Paul Klee, Wassily Kandinsky y Johannes Itten dieron clases en las aulas de esta escuela.

Dato curioso: la ciudad que cuenta con mayor arquitectura inspirada en los principios que enseñaba esta escuela es Tel Aviv, en Israel con más de 4,000 edificios que siguen este estilo. En el D F también pueden encontrar algunas construcciones con este estilo en colonias como Polanco, Del Valle y Condesa.

Fritzia Irizar

Yo conocí su trabajo en una exposición en la Sala de Arte Público Siqueiros y debo decirles que me fascinó.

El aspecto que me parece más interesante de su trabajo es la forma en que maneja el valor del dinero, los diamantes y otros bienes así como el uso efectivo que les da para poner al descubierto situaciones que nos pueden llegar a ser tan comunes.

Para que se den una idea les platicaré el trabajo que más me gusta de ella. Se llama Sin título (Fuerza Bruta) y se trata de una caja fuerte que contiene una cantidad de dinero nada despreciable. La caja se deja en la calle por un tiempo determinado, a las afueras de un banco y en sus distintas caras se escriben ecuaciones en cuya resolución se encuentra la combinación de la caja fuerte. Cualquiera podía intentar abrir la caja, llevársela, abrirla con estetoscopio (como en las películas) o intentar hacerse del contenido de cualquier manera posible y nadie lo impediría.

Aquí podemos ver dos tipos de valores expuestos: primero el dinero, segundo el conocimiento; cualquiera que pueda resolver las ecuaciones puede tener acceso a él. Pero también quien tenga la fuerza para hacerlo usando otros medios.

Muchas más de sus piezas giran entorno a elementos similares. Esconder dinero, diamantes en costales de azúcar o enterrar uno en un centro comercial para crear un mito sobre un tesoro. Con su trabajo siempre surgirá esa duda sobre el verdadero valor de las cosas que consideramos, materialmente, valiosas.

Donald Judd

En un aspecto muy distinto a las publicaciones, sabemos que uno de los artistas que tendrá gran representación por parte de las galerías es Donald Judd (1928 – 1994), cuyo trabajo también me agrada muchísimo.

Fue un escultor estadounidense quien revolucionó la escultura formalmente al preocuparse por la autonomía y la claridad de los objetos y del espacio que los rodea. Sus trabajos son construcciones en realidad sencillas: cubos alineados, cajas de metal empotradas en la pared o cubos apilados sobre una pared.

Su trabajo es normalmente asociado al minimalismo, aunque es un término que él evitaba. Al ver su trabajo hay dos cosas que resaltan: la limpieza y escasez de los elementos y el gran impacto que esto causa en la percepción del espacio. Sus esculturas marcan una tendencia al hacer a un lado lo más posible la forma para concentrarse en realidad en la relación que éstas tendrían con el espacio.

Aparte de estas esculturas en formatos medianos produjo otras de gran formato que se incorporan a espacios al aire libre aunque estas mantienen la limpieza y economía de elementos que se identificaba en su trabajo previo.

Lo que más me gusta de él es que no sólo era artista, también fue teórico del arte. Publicó una importante cantidad de ensayos a lo largo de su vida, estos fueron reunidos en dos publicaciones en 1975 y 1987.

¿Cuál de ellos llama tu atención?