Confieso mi ignorancia en torno a muchas de estas figuras, la mayoría de ellas vloggers y comentaristas que siempre me ha dado mucha pereza ver y escuchar. En la lista podríamos incluir nombres como lonelygirl15 (que tuvo una historia dramática grabada en video que resultó ser una farsa), Ryan Higa (el hombre con más suscripciones del portal de videos), VenetianPrincess (la mujer con más suscripciones en la misma página), entre otros.

Creo que ellos son la más viva representación de la frase de Warhol. Los simbólicos 15 minutos de fama pueden en realidad convertirse en 5 minutos de video, 30 segundos de algún gesto genial, 2 segundos de cualquier tontería. Es impactante observar cómo 500 millones de personas pueden ver un video de alguien, cualquier gente, más aburridos que extraordinarios, hablando frente a una cámara.

Cuando Warhol vivía, el medio de comunicación masiva por excelencia era la televisión. Poco antes de que él se volviera famoso, los Beatles se volvieron "más grandes que Jesucristo" por haber sido vistos por 70 millones de personas en el Ed Sullivan Show.

70 millones. Lejos de los 500 millones que tiene Ryan Higa. Muy lejos.

Warhol se hubiera fascinado por la idea de la fama del anonimato. Él mismo, con sus 15 minutos, la inventó.