Warhol, santo de todas nuestras devociones, robó de utilidad al camuflaje o al menos le dio otra.

Sus pinturas con este tipo de diseños, retratos incluidos o no, separan de inmediato la naturaleza práctica del camuflaje para elevarlo al plano de la estética. O no.

Son diseños hermosos, extraños para principios de siglo, cercanos un poco al diseño textil del Art Nouveau pero no encuentran mucho precedente.

Como tampoco podemos olvidar de dónde vienen, cuál es su bagaje histórico y contexto, lo que representan.

Warhol es un artista contemporáneo porque pone sobre la mesa la posibilidad estética del día a día, de lo práctico, de lo vacío. Resalta la estética más superficial de todo diseño.