¿Qué creen? Netflix anunció que lanzará una segunda temporada de “Ojitos de huevo”, la serie viene con más sorpresas y risas.
Esta comedia, protagonizada por el talentoso Alexis Arroyo, un comediante mexicano ciego, nos lleva por un viaje entre la realidad y la ficción para contar su vida, desde su infancia hasta su aventura dejando Querétaro para perseguir su sueño de ser standupero en la gran CDMX.
¿Por qué ver “Ojitos de huevo”?
La serie no solo brinda carcajadas con las situaciones y aventuras que enfrentan Alexis y su amigo y “manager”, Charly, quien tiene parálisis cerebral, sino que también pone sobre la mesa temas serios como la discapacidad en México, inclusión y discriminación.
Pero el corazón de esta serie de Netflix se encuentra en su elenco diverso y único, encabezado por Alexis Arroyo (Alexis) y Kike Vázquez (Charly). Junto a ellos, figuras como Memo Villegas, Alejandro Calva (Yuyo), Verónica Merchant (Lolis), Begoña Narváez (Johanna), y muchos más, dan vida a esta historia conmovedora y llena de humor.
Una historia sobre la diversidad y la inclusión
El éxito de la serie no es solo mérito de sus actores, sino también de su trama cautivadora. Alexis, en su búsqueda por convertirse en un humorista exitoso, deja atrás a un padre sobreprotector y, junto a Charly, se sumerge en la complejidad y diversidad de la ciudad más grande del mundo, la Ciudad de México.
En tanto, la serie nos desafía a cuestionar nuestras percepciones sobre la diversidad funcional y a reconocer el valor de perseguir los sueños, incluso en un mundo que a menudo ignora dicha diversidad.
Debes saber que “Ojitos de huevo” no solo es un éxito en México, sino que ha resonado en varios rincones del mundo, ganándose un lugar destacado en el catálogo de Netflix. Con su segunda temporada en camino, promete seguir haciéndonos reír, reflexionar y, sobre todo, ver la vida con una perspectiva más abierta y enriquecedora.
Ármate tu plan de pelis, palomitas y acuéstate en tu sillón este fin de semana a ver “Ojitos de huevo”, no te va a decepcionar.
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