Está donde antes el Medusas, y es ya un furor en la zona de antreo sureño. ¿Ya lo conoces?

Lo bueno: La música. Si te late el rollo pop, te va a encantar: desde Onda Vaselina hasta K-Paz y Chente, pasando por los clásicos de dance noventero. Si andas entre los 23 y los 35, simplemente no te podrás sentar.

Lo malo: Para ser un antro de ese tamaño y lujo, la decoración no es nada para llamar a casa. Pero lo importante es bailar, ¿o no? Y para eso, el espacio es muy grande, con todo y patio para fumadores y pista de baile levadiza.

Lo feo: La cadena es muy dura. O sea: sí tienes que ir mega arregladito, fresón. De lo contrario, la cadenera (sí: es chica) ni siquiera te verá.

Lo que hay que saber: Está donde antes era Medusa’s, y ya conoces esa callecita: es súper conflictiva. Así que déjale tu coche al valet, pero ten paciencia.

Lo que hay que beber: Están los clásicos drinks, y los precios son altos pero dentro del promedio antrero ($1200 la botella). Sin embargo, es fácil obtener tarjetas que acumulan puntos en cada visita, los cuales podrás cambiar por tragos o, si eres hombre, por los $200 de cover.