Para subir al cielo se necesita una escalera grande, y cafebrerías el Péndulo se están esforzando para darnos alternativas nocturnas innovadoras y de calidad. Una de ellas en pleno corazón de la Roma.

Empecemos hablando de su ambiente: este impresionante edificio mezcla detalles de una casona típica de la Roma con toques contemporáneos y detalles eclécticos en la terraza bar, justo frente al famoso Foro del Tejedor. Y es que en su origen este bar tuvo la función de ser una alternativa de precopeo, como calentamiento previo a un concierto o en el intermedio espectáculos de stand up comedy. Ahora el bar brilla con luz propia gracias a la amplia oferta de coctelería y a las promociones que ofrecen para todos los asistentes a sus espectáculos. Se puede disfrutar de un trago en la terraza bar, aún cuando no se asista a ninguno de los eventos del Foro.

Éste es un espacio relajado que evoca una especie de patio familiar. La clientela va por el lado de intelectuales, artistas, hipsters y uno que otro grupo estudiantes sin etiquetas que después de husmear por la librería termina por pedir una jarra de chela oscura con cuatro tarros helados.

Recomendamos entrarle a los mezcales Tlacuache y Murciélago, para picar unos nachos a la Waits y las mini hamburguesas son para chuparse los dedos. Si traes ánimo de un coctel, llevan mención especial su cosmopolitan y su mojito, dos clásicos que están súper bien preparados. Si ya traes hambre en serio pide unas costillitas el Péndulo y compleméntala con una margarita de guanábana.

La vista es muy bonita, pues desde la terraza dominas una parte arbolada del camellón de Álvaro Obregón. Esta terraza es ideal para cerrar algún proyecto, tomar chelas con los amigos o, más entrada la noche, disfrutar de algún evento con copa en mano. Igualmente, si simplemente pasas por ahí y se te ocurre comprar algún libro de Hemingway o Faulkner, ¿por qué no darle gusto a tu irremediable antojo de letras con alcohol?