Aunque reducido en tamaño, este bar ubicado en uno de los brazos de Álvaro Obregón tiene espacio para todos. Con un concepto europeo de barra de cocina a la vista de todos, podrías pensar que el tamaño del lugar y con una cocina frente a todos podría llegar a saturarte pero todo lo contrario.

Cuenta con una carta breve pero plagada con creaciones gastronómicas detalladas en las que una hamburguesa mini, tapas o platillos de inspiración libanesa, todas elaboradas en tamaños de una o dos mordidas que se convierten en el acompañante ideal para el trago de la semana.

En cuanto a bebidas, este lugar ofrece cervezas, mezcal y bebida internacional y nacional, los precios son accesibles y hay opción de sentarse en una mini sección de fumar afuera; debes tomar mucho en cuenta el tamaño del lugar pues si la saturación no es lo tuyo puede que no te acomodes tanto. Entre semana ésta ya es una opción favorita de muchos, sobre todo por el tinte homo-friendly que lo caracteriza y hace que a partir del miércoles esté lleno de todos los que trabajan o viven por la zona, te encontrarás a todo mundo.