Año nuevo, sexo nuevo

Éntrale con singular alegría a estos juegos

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No te vamos a desear paz, armonía y todos esos clichés de fin de año. Bueno, sí estaría chido que el próximo año esté lleno de cosas buenas para ti y para toda la gente que tienes cerca, pero ¿qué mejor que desearte 365 días de buen sexo? 

Y no, no creas que te daremos consejos baratos. No, señor. Te traemos la novedad, el encanto, la magia de algunas técnicas para que practiques con quien se te dé la regalada gana. Ojo, algunas están en el nivel de lo extremo, pero… ¿qué es del sexo si no es salvaje y aventado?

Practiquen bajo su propio riesgo:

La hormiga caliente

Si le sacas a los insectos, pasa a la siguiente técnica, pero si no, aquí te va: resulta que en el lejano Oriente se les ocurrió involucrar insectos a la hora de tener sexo. ¿Cómo? Bueno, pues en ciertos clubes japonenes, las prostitutas de la high utilizan insectos inofensivos para estimular algunas partes de los clientes, específicamente aquellas que los prendan como testículos, perineo y ano.

En esta práctica, conocida como formicofilia, las chicas sueltan un puñado en estas zonas mientras ellas realizan sexo oral a sus clientes. Es una onda que combina tanto el cosquilleo de las hormiguitas como la cuestión psicológica de agregar insectos al ponerle nombre al niño.

El cangrejo ruso

Si te gustan una onda salvaje, esto es para ti. Esta técnica, también conocida como el golpe del amor, consiste en darle un trancazo seco y sin dolor en las costillas a tu pareja. Específicamente debe ser en una zona que es estimulada por la acupuntura y que hace que el golpe contraiga el ano y se intensifique el placer que le produzca el sexo anal. Eso sí, hay que saber muy bien dónde meter el guamazo y no pasarse de lanza con la intensidad del golpe.

La pinza birmana

Si tienes maestría en el uso de las bolas chinas con la vagina, entonces esto es lo tuyo. La pinza birmana consiste en darle masaje a tu pareja con los músculos de la vagina y cuando tu pareja esté a punto de llegar al orgasmo, sostener el pene con la mano para retardarlo la mayor cantidad de tiempo posible. Y para tener un final feliz, hay que presionar determinado punto entre el escroto y el ano para que la eyaculación sea épica. 

Masaje acuático

Este ya es nivel pro. En Japón hay algunos clubes con albercas de paredes transparentes en donde los clientes pueden ver a las chicas hacer de las suyas con posiciones sexuales increíbles, lubricantes especiales para estar sumergido y chorros de agua que apuntan hacia los lugares precisos de placer. Y por si esto no fuera poco, hay quienes utilizan cuerdas para practicar el water bondage.

Felación a la carta

Si ya se cansaron de cambiar los condones para variarle al sabor y a la textura a la hora de dar sexo oral, chequen esta técnica. Consiste en ofrecer una gama de opciones para practicar una felación (o también cunnilingus, por qué no) como: alternar entre bebidas calientes y frías, carbonatadas, eucalipto, hielo y todo lo que permita estimular de forma distinta que lo haría la simple lengua.

Chapelet Thai

Ya les hemos hablado sobre el punto P de los hombres y esta técnica va para quienes accedan a que durante la relación sexual se les introduzca un rosario anal y quitarlo de a poquitos en el momento del orgasmo, lo cual haría que se prolongara. Toda una ciencia del placer.

Carrete filipino

Aquí hay que ser muy diestro en el manejo de tus manos y tus habilidades. Consiste en atar un cordel en la base del pene y jalarlo durante el sexo oral, la masturbación o durante la relación sexual. Se debe amarrar cuando tu amiguito ya esté de pie y una vez comiencen con la acción, tu pareja deberá jalar el cordel para que se logre acumular la sangre y así, se intensificar el orgasmo. 

Se ven fuera de lo común, ¿a poco no? Pero en esos países asiáticos hacen las delicias de los momentos de sexo desenfrenado entre quienes los practican. Así que, ¿qué pierde uno al probarlos?