Influenciados por el sonido del gospel y el blues
norteamericano U2 decidió filmar en blanco y negro un documental sobre la gira
de presentación de su disco Joshua Tree. Visitaron iglesias para cantar "I
Still Haven’t Found What I’m Looking for" le pidieron a B.B. King que los
acompañara a tocar "When Love Comes to Town", mientras hacían guiños a Hendrix,
Dylan y le robaban a Manson la canción que él a su vez robó de los Beatles: "Helter
Skelter".

Este documental es testigo del crecimiento de un grupo de chicos
rebeldes de Irlanda a una banda universal, capaz de llenar estadios con himnos
como "Where the Streets Have no name" o la mentada "Whith or Without You".

A pesar de la limitada experiencia y pericia de su director
Phil Joanou, el filme atrapa el ambiente desolado de los desiertos
norteamericanos y una que otra interpretación memorable en vivo de una banda que
parecía encontrar una voz propia y que pronto se encargaría de talar la
inocencia de su "árbol de Josué" a base de los reverbs industriales de The Edge
en Achtung baby.