R. Kelly ha sido uno de los intérpretes de R&B más exitosos de los últimos años. Sin contar sus múltiples colaboraciones con cantantes como Whitney Houston, Céline Dion y Michael Jackson, Kelly ha tenido muchísimo éxito particularmente con la aclamada "I Believe I Can Fly". (Sí la de Space Jam) Pero sus triunfos se han visto empañados por un mal hábito con el cual ha luchado por años: su gusto por la pornografía infantil.

En el 2002, llegó a un periódico estadounidense (y semanas después a Internet)un videoen el cual se mostraba a Kelly teniendo relaciones sexuales y orinando a una adolescente de 14 años.Inmediatamente comenzó una investigación y se le levantaron varios cargos entre ellos pornografía infantil y grabar actos de pornografía infantil.

Posteriormente se le volvió a acusar de lo primero y se cateó su casa, ahí se encontraron fotos y un video de Kelly teniendo relaciones con una menor de edad. El cateo fue calificado de injustificado y por lo tanto las pruebas obtenidas no pudieron ser validadas.

El juicio de Kelly fue largo, y –a pesar de tener varios cargos en su contra– el jurado lo declaró inocente. Sin embargo, se hizo un poco de justicia ya que la carrera de Kelly nunca volvió a tener el auge que tuvo antes del escándalo de los videos.