Se presentará en octubre por primera vez en México

23 de septiembre de 2016

Ara Malikian es un fuera de serie de la música clásica. Tras ser incomprendido en el conservatorio y por sus maestros, que lo regañaban porque le gustaba el rock o el jazz, decidió tocar el violín a su manera y así restarle solemnidad a este género que tiende al esnobismo.

No sólo sus energéticas interpretaciones en vivo de Bach o Mozart  –en las que salta, baila y sonríe en el escenario– lo hacen excepcional. También su look, que parece más al de una estrella del rock o del hip hop, lo sitúa como una “anomalía” de la música clásica.

“Los protocolos y la seriedad en torno a la música clásica y la misma arrogancia de sus músicos le han hecho mucho daño al género y lo han alejado de mucho público. Es una pena porque es maravillosa y merece ser escuchada por todos”, dice Malikian en entrevista telefónica desde su casa en Madrid.

El músico español, aunque de padres armenios, nacido en Líbano, ha sido etiquetado por los medios como un artista que está democratizando la música clásica; sin embargo, él se toma esta etiqueta-halago con humildad.

“Yo no soy quién para democratizar una música que existe desde hace siglos, simplemente hago esa música de la manera que la siento y da la casualidad que le llega a mucha gente. Es verdad que los últimos años muchos han ido a escucharme tocar, personas que quizá nunca antes lo habían hecho y le perdieron el miedo al género y se dieron la oportunidad. Vivo eso con mucha felicidad, pero no iría tan lejos en pensar que estoy cambiando el mundo; la música clásica no me necesita, es tan grande y hermosa que vivirá sin mí de todas formas”.

"La música clásica no me necesita, es tan grande y hermosa que vivirá sin mí de todas formas”.

Poseedor de un estilo propio, Ara heredó la pasión musical por su padre violinista. A los 15 años fue becado por la Hochschule für Musik und Theater Hannover y se mudó a Alemania; después completó sus estudios en Londres. Ha ganado múltiples premios –destacan los importantes galardones Felix Mendelssohn y Pablo Sarasate– y anualmente realiza centenas de presentaciones en más 40 países.

Malikian, 48 años, confiesa que aunque ya visitó México como turista, se siente emocionado por tocar por primera vez aquí, ya que admira nuestra cultural musical.

“Conozco de casi toda la vida la cultura mexicana por sus grandes artistas y su música clásica porque he tenido la suerte de tocar varias obras de Manuel M. Ponce, que me inspira mucho. También me gusta su música más tradicional y folklórica porque la encuentro muy inspiradora”, explica Ara, quien ofrecerá su primer concierto el 8 de octubre en el Festival Cervantino, en Guanajuato.

A tono con sus eclécticos gustos, también revela que siente fascinación por el mariachi.

“Hay una tradición del violín a través del mariachi y creo que es muy importante inspirarse de esos músicos que tienen una forma de tocar tan bonita”.

En su presentación en Morelia del 11 de octubre, el creador del disco 15 (2015), titulado así en homenaje al número de años que ha radicado en España, tocará para un público conformado por niños, a quienes considera sus mejores críticos.

“Hay una tradición del violín a través del mariachi y creo que es muy importante inspirarse de esos músicos que tienen una forma de tocar tan bonita”.

“He tenido la suerte de hacer conciertos para niños y eso ha sido un aprendizaje muy importante. Al principio lo hice para despertarles el amor por la música y poco a poco se convirtió en una de mis actividades favoritas porque aprendo mucho porque ellos no tienen prejuicios, son muy sinceros y cuando escuchan, comentan lo que sienten. Tocar para ellos y oír sus comentarios son unas de las cosas más magníficas de mi carrera”. 

Octubre 8 2016
Festival Cervantino
Guanajuato
festivalcervantino.gob.mx

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